EL JAMES BOND MAS MEDIOCRE, EN LA MEJOR PELI DE JAMES BOND


Perpetrado por Oskarele

Sean Connery, el genial actor escocés, en 1967, tras cinco películas encarnando a James Bond, decidió dejarlo por miedo a encasillarse (en realidad ya estaba encasillado y solo tiempo después consiguió escapar al personaje). Los productores, alarmados, decidieron buscar un sustituto para continuar con la exitosa saga.

Por otro lado, George Lazenby, un mediocre actor australiano, aunque ya famoso como modelo (era uno de los mejor pagados del mundo), decidió presentarse al casting. Se dirige al sastre Anthony Sinclair, donde Sean Connery se vestía, y se hace un traje, compra un Rolex y se corta el pelo a lo "Bond".

Una vez listo, entra en la oficina del productor y pide ver a Harry Saltzman sin tener visita concertada. Una vez encontrándose ante éste, le dice: "Parece que estáis buscando a James Bond".

Albert R. Broccoli y Harry Saltzman, los productores de la megnífica saga, por fin habian encontrado al perfecto Bond.
Inicialmente habían pensado en Timothy Dalton (que finalmente acabó encarnando al personaje en dos pelis), pero éste declinó la invitación pues creía que era demasiado joven para el papel y también bastante intimidado de seguir el legado dejado por Connery. También se consideró a Roger Moore para el papel pero no se encontraba disponible debido a que estaba atado contractualmente a la serie de televisión “El Santo”.

Lo contrataron para siete películas, a pesar de su inexperiencia, logrando así heredar un papel deseado por muchos actores.

La primera (y la única que hizo finalmente) fue "Al servicio secreto de su Majestad" y fue dirigida por Peter Hunt y estrenada en 1969.

Curiosamente, y en contra de lo tradicionalmente se ha dicho, fue el propio Lazenby el que decidió romper el contrato. La peli en realidad no fue un fracaso económico (motivo que siempre se ha alegado para el cese del actor) ya que fue el segundo filme más exitoso de 1969 solo superado por “Dos hombres y un destino”, recaudando 87 millones de pavos, más o menos lo mismo que recaudarían las películas de los ochenta de Dalton.

Pero lo cierto es que fue el actor el que rompió el contrato, ya que, según declaraciones suyas, no quería encasillarse en el papel. Además pensaba que era un personaje retrogrado y anticuado en aquellos liberales años setenta.

Un motivo importante debió ser la terrible contundencia con que la crítica atacó su actuación, realmente mediocre.
Pero lo cierto es que entre los aficionados a las pelis de James Bond es considerada hoy en día como una de las mejores películas, por su tono oscuro y realista, sus espectaculares escenas de acción, su fidelidad a la novela original, la música de John Barry y a su profundidad emocional.

Para finalizar mencionar dos curiosidades. La primera es que que al final de la típica intro de las pelis de Bond, Bond (Lazenby) dice: "Esto nunca le pasó al otro tipo", haciendo referencia al Bond de Connery…

La segunda que es que finalmente Sean Connery protagonizó la siguiente película de la saga, “Diamantes para la eternidad”, a cambio de un sustancioso cheque de dos millones de pavos, que sirvió para calmar su miedo a ser encasillado. Por cierto, una peli muy inferior a la de Lazenby.

Mas info y fuentes por aquí: http://es.wikipedia.org/wiki/George_Lazenby; aquí:http://es.wikipedia.org/wiki/Diamonds_Are_Forever; aquí: http://quefuede.lacoctelera.net/post/2005/08/08/george-lazenby; aquí: http://www.archivo007.com/index.php?option=com_content&task=view&id=23&Itemid=55;

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